El hipotiroidismo es una condición caracterizada por una producción insuficiente de hormonas tiroideas por la glándula tiroides. Esta patología, relativamente común, puede tratarse con éxito.
Síntomas:
Los síntomas del hipotiroidismo son sutiles, lo que puede resultar en años sin diagnóstico. Algunos síntomas incluyen aumento de peso, disminución de la libido, estreñimiento, palidez, piel reseca, hinchazón en cara, manos y pies, menstruación irregular, dolor muscular y articular.
Causas:
La causa principal suele ser un problema autoinmune, donde anticuerpos del sistema inmunológico atacan la glándula tiroides. Se distinguen tres tipos según el factor desencadenante:
- Hipotiroidismo primario: causado por un fallo en la glándula tiroides, con elevados niveles de hormona TSH.
- Hipotiroidismo secundario: ocurre por una alteración en la hipófisis, disminuyendo los valores de TSH.
- Hipotiroidismo periférico o terciario: poco frecuente y provocado por la incapacidad de los tejidos para responder a las hormonas tiroideas.
Tiroiditis de Hashimoto:
Es una forma común de hipotiroidismo, caracterizada por el ataque autoinmune de linfocitos T citotóxicos a la glándula tiroides, más prevalente en mujeres.
Impacto en la Fertilidad:
El hipotiroidismo puede afectar la fertilidad, reduciendo la producción de óvulos y causando irregularidades en el ciclo menstrual. En embarazadas, se vincula con un mayor riesgo de abortos espontáneos.
Recomendaciones en el Embarazo:
Mujeres hipotiroideas deben tener precaución durante el embarazo, ya que bajos niveles de hormonas tiroideas se asocian con un aumento en la tasa de abortos espontáneos.
Conclusiones:
Dada la variedad de síntomas y consecuencias potenciales, es esencial un diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado del hipotiroidismo, especialmente en mujeres en edad fértil o embarazadas.