La fecundación in vitro (FIV) con donación de óvulos es un tratamiento de reproducción asistida que permite a una mujer receptora conseguir el embarazo utilizando los ovocitos de una donante anónima.

Este tratamiento de fertilidad también es conocido como ovodonación y está indicado para aquellas mujeres que no pueden tener hijos con óvulos propios, ya sea por tener una edad materna avanzada, por sufrir alguna alteración genética o cualquier otro problema con sus gametos.

Una ventaja de la FIV con ovodonación, tanto si es con esperma de la pareja como con semen de donante, es que tiene una alta probabilidad de éxito y por eso cada vez son más las mujeres que recurren a ella para ser madres.

La FIV con donación de óvulos no suele ser el tratamiento de primera opción cuando una mujer o pareja acude a una clínica de fertilidad, ya que normalmente los pacientes quieren intentar el embarazo con sus propios gametos antes.

Sin embargo, las situaciones en las que la ovodonación está claramente indicada son las siguientes: pacientes sin función ovárica (ya sea por fallo ovárico primario, insuficiencia ovárica prematura, ausencia de ovarios o menopausia), y pacientes con función ovárica, pero que no pueden utilizar sus óvulos por anomalías genéticas transmisibles, fallos repetidos en ciclos de FIV anteriores o por tener más de 40 años de edad.

La ovodonación es un proceso muy controlado. Para que pueda realizarse, la candidata a ovodonante tiene que cumplir una serie de requisitos legales, médicos y éticos, y tendrá que pasar por un proceso de selección que valore su aptitud para ser donante. Durante esta preselección se estudia tanto su estado físico como aspectos psicológicos.

Para acceder al programa de donación de óvulos, la futura donante debe tener entre 18 y 35 años, buen estado psicofísico y no ser portadora de enfermedades genéticas, hereditarias o infecciosas transmisibles a la descendencia.

Se trata de un proceso altruista, voluntario y totalmente anónimo. La identidad de la donante de óvulos siempre será confidencial, por lo que la mujer receptora no conocerá a su donante ni viceversa. Es el centro el encargado de realizar la asignación entre donantes y receptoras.

En función del origen de los óvulos, se distinguen dos tipos de ovodonación principalmente: la donación de ovocitos en fresco o la donación con ovocitos vitrificados.

Sin embargo, hoy en día también podemos incluir otros dos tipos de ovodonación en esta clasificación: los óvulos procedentes de banco y la miniovodonación o donación de óvulos compartida.

  • Donación de óvulos en fresco: la donante y la receptora de óvulos tienen que tener el ciclo hormonal sincronizado, por lo que la donante se estimula a la vez que la receptora prepara su endometrio. En el mismo ciclo se produce la extracción de óvulos de la donante y, a los 3 o 5 días, se realiza la transferencia de embriones al útero de la receptora. La desventaja de esta técnica es que si la donante no responde bien a la estimulación ovárica, es posible que la receptora tenga que esperar hasta el siguiente ciclo para realizar la transferencia, lo que conlleva más medicación hormonal y mayor desgaste emocional.
  • Donación de óvulos vitrificados: aquí no es necesario que donante y receptora estén sincronizadas. En primer lugar, se obtienen los ovocitos de la donante y se congelan aquellos que son maduros mediante la técnica de vitrificación. Una vez encontrada una receptora compatible, estos óvulos son desvitrificados y fecundados con el esperma de la pareja o de un donante de semen compatible en caso de tratarse de una doble donación. Igual que ocurre en el caso anterior, la receptora de óvulos también tendrá que realizar el tratamiento de preparación endometrial previamente a la transferencia embrionaria, pero no será de manera coordinada con la donante. La desventaja de este método es que el número de óvulos disponibles para ser fecundados puede disminuir por no sobrevivir todos a la descongelación. Aun así, las tasas de supervivencia actuales son muy buenas gracias a la optimización de la técnica de vitrificación de ovocitos.
  • Óvulos de banco: un banco de óvulos es un departamento encargado de la obtención, evaluación y posterior distribución de óvulos de donantes. Debido a su actividad, los bancos de óvulos cuentan con una amplia y variada base de datos de donantes. Por esta razón, pueden responder ante casi cualquier demanda por parte de las clínicas. Esto permite a los centros reproductivos poder ofrecer el tratamiento de ovodonación de forma prácticamente inmediata, pues es poco común no encontrar una donante compatible en el banco de óvulos.
  • Miniovodonación: consiste en una donación de un número menor de óvulos. Mientras que en una ovodonación completa la receptora obtiene todos los óvulos recuperados de la donante, que pueden ser entre 8 y 10, en la miniovodonación solamente se reciben 4 o 5. La miniovodonación tiene dos finalidades: cuestión económica (el precio se reduce de manera importante y, de este manera, son más las mujeres y parejas que pueden acceder a este tratamiento), y no generar embriones sobrantes, sobre todos las mujeres o parejas que solamente desean tener un hijo por ovodonación.