Término que recoge un conjunto de síntomas que pueden aparecer en una persona si la madre consume bebidas alcohólicas en el embarazo.

La causa es que el alcohol en la sangre materna atraviesa la placenta y llega al feto en desarrollo. De este modo, la exposición al alcohol antes de nacer puede llevar al bebé a problemas físicos y a deficiencias cognitivas y conductuales.

Los síntomas más característicos son: 

Retraso en el crecimiento intrauterino y/o después de nacer.

Ciertos rasgos anómalos en el rostro: ojos rasgados, pequeños, estrechos; ausencia de surco nasolabial (entre nariz y labios) y labio superior fino.

Anomalías en el sistema nervioso central.

Las consecuencias pueden ser: 

  • Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
  • Problemas de conducta y control de impulsos.
  • Depresión y ansiedad.